CAMINO MOZARABE - Etapa 22

LAXE - PUENTE ULLA

13/06/2014

Descripción de la Etapa

El Concello de Lalín muere en el río Deza y pasa el testigo al de Silleda, otro caos poblacional unido por una telaraña de pistas asfaltadas, rápidas para caminar, aunque no siempre cómodas. Tras la parroquia de Dornelas nos salvará de la quema un agradable sendero entre pinos y eucaliptos que nos conducirá hasta unas aldeas del Concello de A Estrada y al fin de la Pontevedra. Tras su bautismo en el río Ulla, A Coruña se presenta decidida a llevarnos frente al Apóstol, pero ese orgullo corresponderá a la jornada de mañana. Hoy descansaremos en una envidiable aldea rural lejos de cualquier agobio.

Madrugamos para no pasar penurias con el tórrido calor gallego, aunque estemos acostumbrado, desayunamos convenientemente y comenzamos la etapa donde la dejamos ayer, justo a la entrada a Laxe.

Recorremos los primeros metros del día por el arcén de la N-525. A 400 metros, tras haber entrado en Vilasoa, dejamos la nacional para transitar por una pista pavimentada y algún que otro tramo de gravilla. Ambas superficies nos dejan a las puertas de Prado, mediana población del Concello de Lalín.

La atravesamos por la carretera y, a la altura de una tienda, nos desviamos a mano izquierda para dejar el asfalto y avanzar entre unas casas. A los 700 metros cruzamos una carretera y continuamos el camino, girando más adelante noventa grados a la derecha y en breve otros noventa grados, esta vez a la izquierda, parecemos bailarinas de ballet con tanto giro. Bajamos por pista asfaltada junto a las casas desperdigadas de Borralla, donde hay una cooperativa de lácteos. En lugar de continuar por la carreterita y hacer la curva hacia la derecha, nos desviamos por un camino que pasa bajo el viaducto y llega hasta el antiguo puente de Taboada sobre el río Deza, afluente del Ulla. Tras cruzarlo subimos un duro tramo enlosado hasta las primeras casas de la parroquia de Taboada, a todos el tramo nos parece precioso.

Tras atravesar la diseminada mancha de casas llegamos hasta la N-525. De nuevo, a 50 metros, la abandonamos por la izquierda para coger un sendero que llega hasta unas naves, donde giramos a mano izquierda. Proseguimos por sendero hasta la siguiente población: Transfontao. Al llegar junto a la portada de la capilla no encontramos ningún tipo de indicación, debiendo continuar por la izquierda. Bajamos por un camino empedrado —en época de lluvias será un bonito río de agua y barro— y subimos hasta las primeras casas de la capital del concello, Silleda, a la que llegamos en la mejor hora, la justa para tomar unas molestias y refrigerarnos de cara al cálido veranillo gallego.

Tras atravesar parte de esta localidad del Trasdeza, saldremos, como no, a la N-525, para ir finiquitándola. Después de pasar la oficina de correos dejamos la carretera por una calle a mano izquierda. En treinta metros salimos a la derecha por un camino y otra vez a la nacional. El juego senda-nacional aburre demasiado y no termina hasta que llegamos junto a una empresa de fabricación de piensos llamada Nudesa. En este punto nos desviamos completamente a la izquierda y bajamos una pista asfaltada para llegar a San Fiz, aldea de Margaride.

Después de pasar el núcleo de casas y un cruce, nos desviamos a mano derecha y de forma inmediata a la izquierda. Así entramos en un bonito sendero arbolado que cruza una pista asfaltada. Continuamos por un camino en ligero descenso que pasa al lado de unas naves agrícolas y lleva a cruzar un puente sobre un afluente del río Deza, el Toxa. Después del vado giramos bruscamente a la izquierda y, de seguido, a la derecha. Cruzamos la N-640 y en breve sobre la AP-53. Seguimos caminando por asfalto y, al llegar a la altura de unas casas, giramos a la derecha para iniciar más tarde nuestra aproximación a la N-525 por una pista de gravilla. Entramos de esta manera en Bandeira. El albergue situado en el Camping de Médelo se encuentra cerrado y desde julio de 2013 está disponible el nuevo albergue de peregrinos de Bandeira.

Atravesamos Bandeira —a la jora del ángelus— y en la misma carretera encontramos regocijo en un humilde bar regentado por unas amabilísimas paisanas que nos agasajan con una tapitas, ya que previamente hemos pedido unas ampollas bebibles de cervezas y hemos sacado unas viandas para acompañar, con su correspondiente permiso, repetimos las ampollas bebibles y reintegramos nuestra marcha, y, al final de la población, cogemos a la derecha el desvío a A Casela. Un picado descenso por carretera, el paso de un arroyo y una breve subida nos llevan hasta las primeras casas de Vilariño, parroquia de Lamela, Silleda. Salimos por pista vecinal y llegamos tras una recta de kilómetro y medio junto a un establo y una casa (el mojón jacobeo marca 30,459 kilómetros a Santiago). Reanudamos la marcha por un camino que muere otra vez en una ennegrecida pista que baja hasta la parroquia de Dornelas y su iglesia de San Martiño.

Decimos adiós a esta parroquia y salimos tomando una carretera secundaria a mano izquierda. La seguiremos durante un kilómetro largo para girar a mano izquierda en un cruce y, en breve hacia la derecha, evitando desembocar en la cercana N-525. El tramo que viene a continuación es, sin duda, uno de los más agradables de la jornada. Es una mezcla entre pista y sendero que discurre durante dos kilómetros entre una vasta población de pinos, eucaliptos y tojos. Se acaba de la peor manera, saliendo a una pista asfaltada que nos lleva a cruzar una carretera. Llegamos primero a O Seixo (Bar. ¡Cierra los lunes!), y giramos más tarde a la derecha para bajar hasta Castro. En fuerte descenso enlazamos con Ponte Ulla, la siguiente localidad y primera de la provincia de A Coruña.

La estrenamos cruzando el río Ulla, que le da nombre y que sirve de límite provincial. El Ulla forma la segunda cuenca más importante de la Comunidad Gallega y desemboca en la ría de Arosa tras un viaje de más de 130 kilómetros. Se sale de Ponte Ulla por un camino, pasando bajo el puente corredor del pazo de Vistalegre y salimos a la N-525, en subida y siguiendo por el arcén de la izquierda hasta coger un tramo de viejo asfalto que revierte de nuevo en la carretera nacional. Unos pasos más y arribamos al albergue privado de Ponte Ulla junto a la estación de servicio junto a la carretera N-525, aquí reconfortamos nuestros cuerpos y gargantas con unas viandas gallegas y extremeñas al unísono con caldos —vino Godello y cerveza— gallegos que se alargan en la tarde viendo un partido de futbol de España que nos defrauda en el mundial brasileiro, abatidos por la mala imagen dada por la selección española, nos retiramos a descansar un rato antes de cenar y descansar, ya que madrugaremos bastante para estar en la plaza del Obradoiro antes de la misa del peregrino a la que asistirán algunos, para posteriormente disfrutar de tiempo libre suficiente en Santiago de Compostela.

Que Ver, que hacer...

  • Taboada

    Bonito vado de piedra sobre el río Deza, reconstruido en el XVII sobre otras fábricas más antiguas.

  • Transfontao

    Capilla y pazo, propiedad particular del siglo XVIII.

  • Dornelas

    Iglesia de San Martiño, conserva un ábside semicircular del siglo XII.

  • O Seixo

    Ermita de San Miguel situada en la aldea de O Seixo, el núcleo anterior a la parroquia de San Miguel de Castro.

Galería Fotográfica

Pasos que unen, cumbres que inspiran.